miércoles

Pues eso

-¿Y cómo lo titularías?-.
-Healing-.
-¿Por qué? ¿Te quieres hacer el chulo con el inglés?-.
-Simplemente, en castellano me suena suave. Aunque si digo la verdad, no sé como expresarlo. Intentaré explicarlo. Quiero hacer referencia a las heridas, sobretodo las costras, y su posterior cicatriz. Al picor, y lo que pasa cuando las rascas. Ese escozor al mismo tiempo que vas desprendiendo la costra. A pesar de que, probablemente, luego se infecte. Pero lo sigues haciendo. Por ese regustillo, ese placer extraño al hacerlo. Masoquista y adictivo. Esa sensación momentánea que, al final, sólo consigue que tarde más en cicatrizar la herida y que ésta sea perdurable en forma de marca en la pie. Pero ese sentimiento fugaz y completo. Ese mismo. Que a pesar de que quieras que una herida desaparezca, no puedas parar de rascar para vivirlo-.

Para lo que dan 3 días

Que las memorias me den tregua es algo inútil en mi imaginario. Van a mostrarse ahí, desagradables. Duda hasta del palpitar de mi estómago frente a los recuerdos. Me martirizan, en pasado y en presente.

-

Hoy se ha unido el tiempo para atormentarme.. No sé a qué hacer frente antes. Mucho debí haber gritado, en otros momentos debí haber puesto esfuerzo. Pero esto tiene poca solución ahora. He caído en la hecatombe.

-

Así se me muestra el futuro. Tan incierto como voluble. Mi presente es mediocre, y cómo me repulsa.

-

Ha sido llegar y que me arrulle la desconfianza. La ansiedad. La ira. Ha aparecido todo lo que he bloqueado en mi cabeza. Mierda. Estoy cayendo otra vez.

-

Shit. Shit. Shit. Shit. Bocazas. Fuck.

-

Es extraña esta sensación de medio desamparo, medio abandono. La de aparecer y no verla, me refiero. Los pensamientos eran como un bombardeo, y a su vez, me han dejado en una calma insensible. Curioso, este bicho que tengo dentro.

-

- En realidad, - Pensé en decir - debería agradecertelo. Has conseguido que no sienta absolutamente nada. Me has convertido en el monstruo que siempre he deseado ser-.

-

Intercambié las palabras que debí decir por las que no lo debería haber hecho nunca.

-

Mientras, mentiras de lenguas viperinas e interesadas.

-

Menos mal que me quedan dos días aquí.

viernes

Triggered. Shots fired... Boom. Headshot.

Que mal me viene siempre verte. Cuando me creo cabal, acabas enloqueciéndome. El gato se tiene que volver a lamer las heridas, mientras procura saborear la sangre, el pecado. Eres mi estrella fugaz de la mala suerte. Si antes eras mariposa, ahora estás en llamas, y me quemas contigo.
Convulsos estos tiempos en los que apareces, sobretodo porque creí que me había acostumbrado a vivir sin tu revoloteo. Sinceramente, no fue el encontrarte frente a mí lo que me destruyó. De hecho, me mantuve mucho más firme de lo que hubiese imaginado. Sin embargo, me felicité antes de tiempo, cuando creí que había superado la prueba sin despeinarme. Fue ese olor en la despedida final. El olor a recuerdos, a calor, a memoria de hormonas revolucionadas y sexo feroz. A muerte en vida y paraíso descubierto. A infierno añorado.
Mierda. Sucumbí en mente. Justo lo que quería evitar.